Las disputas feroces entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo con mayoría opositora que ocurren en el Congreso Nacional, algunos misioneros memoriosos la conciben como un déjà vu, repasando lo ocurrido entre los años 2003 al 2005 con la llegada del Frente Renovador al poder.
“No fue grato en los 2 años que se dio de esta manera tan voraz, no fue gratuito porque todos padecíamos las consecuencias de ésta confrontación, sostuvo Pablo Hulet, Diputado Provincial del FR en el período 2003 al 2007.
Al mismo tiempo, reconoció que la tensión bajó luego de la elección de medio término donde el oficialismo logró sumar más legisladores propios. “Hay que bajar los decibeles porque sino, no vamos a poder conversar nunca. No podemos seguir con este nivel de agresión, de destrato, de maltrato verbal que llega a veces al maltrato físico, no se puede. Y los primeros que deben dar el ejemplo son los que están en los primeros lugares de autoridad”, remarcó.
