Expresó con profunda angustia por el robo del que fue víctima ésta madrugada la dueña de un local comercial ubicado en Aristóbulo del Valle.
“Te juro por mi vida, prefiero ir en cana 30 años, pero le rompo la cabeza, lo mato directamente, que no le roben más a nadie. A mí no me importa nada, acá esto es así: el que roba se mata, punto, se terminó. Entonces no se reproducen esas porquerías”, sostuvo Liliana, cargada de indignación e impotencia.