La Intendente de la localidad de General Urquiza “priorizará su municipio y la gente que la eligió para ser Intendente, por sobre su aspiración política de llegar a ser Diputada provincia”, aseguró la fuente.
La dimisión sería oficializada mañana ante las autoridades correspondientes, pero la decisión política ya habría sido tomada en las últimas horas.
Con la posible renuncia a la Cámara el oficialismo busca disolver el posible escándalo político e institucional que amenazaba con desatarse por la sucesión de Cabrera en la pequeña localidad de la Ruta 12.
Vale aclarar que desde la redacción intentamos corroborar la versión, pero la Intendente no respondió las llamadas, ni contesto los mensajes enviados.
EL CONFLICTO:
El trasfondo de la crisis es la sucesión de la intendenta Fátima Cabrera, esposa del exministro Horacio Blodek. La jefa comunal fue electa diputada provincial y debería asumir el 10 de diciembre, pero el matrimonio no parece dispuesto a soltar el control del municipio que conduce desde 2016.
Según la Ley Orgánica de Municipalidades, quien debe reemplazarla es el primer concejal de su lista, José Ptaszenczuk, actual presidente del Concejo Deliberante. Sin embargo, habrían planeado una maniobra para destituirlo y dejar en su lugar a Agostina Blodek, la segunda concejal y su hija de apenas 25 años.
La sesión del Concejo Deliberante del municipio de General Urquiza convocada para el lunes a las 18, en la que, supuestamente, un grupo de concejales pretendía destituir al presidente del cuerpo, José Ptaszenczuk, fue finalmente suspendida a último momento. La decisión calmó una tensión que había ido en aumento durante todo el fin de semana, con vecinos que se declaraban en alerta y advertían que cortarían la Ruta Nacional 12 si se concretaba el intento.
